A todos nos ha pasado: estamos parados en el tee, sujetando el driver con confianza, mientras visualizamos el golpe perfecto que va directo por el centro de la calle. Pero la realidad, en ocasiones, es otra historia. El slice traicionero, el hook inesperado, o peor, ese «pop-up» que apenas avanza. Salir recto con el driver puede parecer imposible a veces, pero con algunos consejos prácticos, cualquiera puede mejorar su juego. Hoy en myGolf te contamos cómo “tratar” de salir recto con el driver.
Como siempre, la postura lo es todo. Asegúrate de que tus pies estén al ancho de los hombros, con la bola colocada frente a tu talón izquierdo (diestros). Inclina ligeramente el eje de tu cuerpo hacia la derecha para conseguir un ángulo de ataque ascendente. Este detalle es más importante de lo que parece: un swing ascendente te ayudará a reducir el spin y a conseguir más distancia con un vuelo más controlado.
Agarra tu driver con naturalidad. Un agarre muy apretado es un enemigo. Si sientes que estás estrangulando el palo, relájate. La presión debería ser firme, pero cómoda. Un buen truco es mantener una presión de agarre similar a la que usarías para sujetar un tubo de pasta de dientes sin apretar la pasta. La idea es permitir que el palo trabaje contigo, no en tu contra.
El swing no es una carrera; intentar pegarle a la bola con todas las fuerzas, pensando que la potencia lo es todo, es uno de los típicos errores. Relajarse es la clave. Concéntrate en un ritmo fluido, como si tu swing fuera una especie de baile. Un swing bien coordinado y controlado te permitirá golpear la bola con la cara del palo cuadrada en el impacto.
Otro tip infalible es la alineación. Si te paras con los hombros apuntando al objetivo, ya tienes la mitad del camino hecho. Una forma sencilla de comprobarlo es colocar un palo en el suelo, paralelo a la línea de objetivo. Usa este truco en la práctica para acostumbrarte a esa sensación de estar correctamente alineado.
El driver tiene un punto dulce (o sweet spot) que debes aprender a golpear consistentemente. Si impactas la bola en el centro de la cara del palo, conseguirás un vuelo más recto y predecible. Un consejo práctico es usar un poco de spray para el pie en la cara del palo durante las prácticas; esto te permitirá ver dónde estás impactando y ajustar en consecuencia.
Rotación, el swing de golf no es un movimiento de brazos, sino una rotación del cuerpo. Para salir recto con el driver, necesitas involucrar la parte inferior del cuerpo. Gira tus hombros completamente en el backswing y asegúrate de transferir tu peso de la pierna derecha a la izquierda en el downswing. Esto te dará la estabilidad y potencia necesarias sin perder el control.
Por último, pero no menos importante, la parte mental es esencial. Si te paras en el tee pensando que vas a fallar, lo más probable es que lo hagas. Mantén la calma y visualiza el golpe que quieres realizar. Un golfista seguro es un golfista efectivo.
Salir recto con el driver no es un misterio ni una hazaña reservada para los profesionales. Con estos consejos y un poco de práctica, podrás salir con confianza y sorprender a tus amigos (y a ti mismo) en el campo. Así que la próxima vez que estés en el tee, respira hondo, alinea tu golpe, y recuerda: un buen swing es como un buen chiste, todo está en el timing.
